En la psicología se habla de la importancia de establecer límites, sin embargo no se hace referencia de las consecuencias que puede traer consigo el lograr colocar estos límites en nuestras relaciones. Cuando conseguimos aplicarlos en nuestro entorno puede traer consigo diversas reacciones. Aquí te presentamos lo que puede suceder cuando ponemos límites:
Aprende a poner límites con nuestros psicólogos.
La primera vez que colocas límites, no salen de una «manera asertiva»
Es común que las primeras veces que intentamos defender nuestras necesidades y derechos a través de los límites podamos responder de manera agresiva o con poco tacto.
Pueden haber sentimientos de culpa luego de un límite
Al momento de poner límites puede que no solo sintamos sentimientos de enojo que nos puedan llevar a ser agresivos, sino que podemos comenzar a sentir culpa por decirles que «NO» a las demás personas.
Cuando aprendes a establecer límites, puedes llegar a tomarles cariño, hasta el punto de exagerar un poco.
Tu contexto puede rechazar tus límites
Es posible que las personas con quien compartes tus límites no les agrade, es normal que ante los primeros límites las consecuencias sea algún tipo de rechazo, criticas o ataques a tu persona. En ocasiones, puede que algunas personas te perciban como el/la malo/a de la historia.
En fin, nadie dijo que sería fácil poner límites, pero te aseguramos que si persistes lograras ver las consecuencias positivas de establecer límites sanos a tus relaciones.
Conoce nuestros equipo de psicólogos en Santo Domingo.